jueves, 24 de junio de 2010

Der Kuss

... Cada vez que me besabas, nos tatuabas en el cuadro de Gustav Klimt. Y una compleja ecuación demostraba que la unidad equivale a dos.
Ahora la nostalgia es el pan mío de cada día. Doscientos seis kilómetros multiplicados por tres meses hacen un dolor total de... Maldita sea, ¿qué unidad cuantifica las lágrimas?
La incomprensión forma parte del juego y viene de los dos bandos.
No quiero tu game over. To me you're perfect.
Y Septiembre es un bálsamo que el Verano me niega.

domingo, 30 de mayo de 2010

Hoy, triste (X)

Ayer la melatonina no acalló al yonqui dolor. Hoy, la cama se asemeja a un buen ataúd donde morir.
Hoy, triste.
Mi corazón abierto, sangrante y enamorado. Tu corazón tras el muro de Berlín y enamorado. Dos corazones que se quieren y tu miedo cerval a lo-que-nunca-debe-ser-hablado.
Yo no necesito saberlo. Sólo a ti.
Y de la silla a la cama no hay un metro sino un glaciar helado. Tengo frío.
Un no importa nada salvo tú, un siempre estaré contigo, un te amo.
Un fuerte abrazo. Cuánto dolían las ganas de besarte.
Un Verano que regresa como el viejo enemigo que siempre fue. Una última esperanza disfrazada de Septiembre.
Mi corazón roto que te mira. lo miras. Y repites un no.
Yo muero.
Hoy, triste.

sábado, 20 de febrero de 2010

Jack London (I)

He tenido tantas ganas de morder como los lobos de Jack London.
Fui Diablo. Atada a ti, necesitada de todo tu mal, yonqui del castigo. Aunque sin gruñido en los labios, sin ojos amargos. Sin paso rápido ni advertencia lenta.
Pero mi incomprensión era la misma.
¿Por qué yo? ¿Por qué, por qué, por... ? De entre todas, una más en la camada.
Y sin embargo, yo.
.
y yo.
Elegirme fue sentenciarme.
Por suerte, ahora ya sé qué significaba ese revólver en tus manos. Ya comprendo. Te enseño los dientes. Y tú comprendes.
Y nos ahorramos sangre.
¿Conocéis el relato "Diablo" de Jack London? Es uno de los mejores que he leído y leeré jamás. Nadie como London para desgranar la naturaleza del hombre y la esencia de lo salvaje, nadie.

viernes, 20 de noviembre de 2009

Gran blanco

... Crees que no hago más que dar vueltas a esta cruel pecera en la que me mantienes preso. Sonríes mientras nado de un lado a otro. No entiendes que no soy feliz aquí. Por mis venas corre el río y aquí estoy; ahogado de claustrofobia. Condenado por mi belleza a servirte de cuadro viviente.
No insistas; no voy a seguir la senda que tus sucios dedos trazan sobre el cristal. Tu comida flotante me da asco. Te odio a ti y al puto cofre del tesoro de plástico.
A cada día que pasa estoy un poco más loco y me golpeo con más fuerza contra el vidrio. No te rías, cabrón; mejor tiembla. Soy un pez sin memoria de ídem.
Y sobrevivo imaginando ser un gran blanco.
Mentalmente paso de Carassius auratus a Carcharodon carcharias. Soy todo dientes. Soy el superpredador perfecto y mi presa habitual.
Mis escamas de colores son ahora gris carne de lija. Mi aspecto primitivo acojona a la perfección. Te devoro con mis ojos negros y fríos. Mi línea lateral va a localizarte estés donde estés. Tengo una montaña de músculos anudados a mis huesos de cartílago. Y te juro que te lo vas a hacer encima cuando veas mi triángulo de la muerte.
Mis dos hileras de dientes van a masticarte. Y después le llegará el turno a las de repuesto.
Ñam.
Esta entrada surge de mi amor incondicional por el tiburón blanco -una auténtica obra de arte de la naturaleza. Y de la profunda pena que siento hacia los peces de colores encerrados en cárceles de cristal.

viernes, 9 de octubre de 2009

Soneto al ahora

Ahora que me pierdo en ojos-mapa
llegas y pretendes ser brújula;
cuando mi amor por ti ya coagula
y casi se oxida la última grapa.

Ahora que por fin te acojonas
casualmente me echas tanto de menos
que predicas un "seamos todos buenos"
mientras bostezan fieras las leonas.

Ahora que estás demasiado lejos
notas que te falta esa cometa,
el sueño veloz de los vencejos.

Ahora que has soltado la muleta
y abrieron sus dos pinzas los cangrejos
me debes, sin duda, una gran historieta.

martes, 29 de septiembre de 2009

Roca

Inquebrantable como una roca erosionada -y aún así poderosa. Cansada de la furia de la embravecida tormenta.
He sido piedra gris hasta que me pintaron de colores. Ahora soy la número diez en la escala de Mohs y me desayuno tus diamantes.
Foto: 16 de Agosto de 2007. Los cubos de la memoria (Llanes)

sábado, 19 de septiembre de 2009

El cable

... En el fondo siempre lo has sabido.
Quizá sea por eso que ahora tu rabia se me clava como una daga. Aunque quizá duela más tu ausencia cuando tus palabras filosas se me enreden y al abandonarme seccionen de mí vísceras y vida -y es jodido no saber en qué orden.
Pero te fuiste con tanto daño que ahora un poco más no me atraviesa. Ya no tienes poder sobre mí, y puedo mirar tus ojos de peligro sin que esa bomba con forma de tarjeta de San Valentín explote.
Me ha llevado meses encontrar el cable correcto. Y soy capaz de cortarlo. Tú verás.