viernes, 29 de mayo de 2009

Otro año más

"¿Sabes cuando dicen que el tiempo vuela? Pues es mentira; no lo sabrás hasta que empieces lejos de todo y de todos, te forjes una nueva vida y la exprimas... y entonces te veas suplicándole al calendario otro año más"
Dos años fugaces que ahora muerden como perros contaminados de rabia. Duelen los días, y las noches se desangran. Y me traicionan los recuerdos mafiosos que cosieron con alambre mi corazón fibroso.
... Hay jueves tatuados en lo más hondo de mi ser. Hay cervezas que alguna vez empaparon mis labios y siempre refrescarán mis heridas. Hay palabras que me traspasaron, hay locuras, hay amigos separados por metros mucho más eternos que algunos kilómetros.
Sé que sigues aquí, pero... voy a echarte de menos. Sin ti no será lo mismo.
La frase más sabia del mundo: Mi hermano.
Foto: 17 de Diciembre de 2009. Plaza mayor (Salamanca)

martes, 12 de mayo de 2009

Soneto al deseo

Eres un tipo con muchos secretos;
la arruga triangular de tus vaqueros,
imán fatal para mis ojos rockeros,
desangra mi ego en sucios sonetos.

Anacondas en torno a mi corazón,
y tu piel de lija rasga los fósforos
sembrados como minas en mis poros,
quemando en tercer grado mi razón.

No jodas, cariño, esto no es un juego,
no soy la porno star de tu museo;
busco y encuentro tu deseo ciego...

Y ya que tus códigos no desbloqueo,
atrévete y construye el cortafuego
que detenga este mortal bombardeo.

martes, 5 de mayo de 2009

Tormenta

¿Sabes ese ambiente denso, envenenado de electricidad, antes de la tormenta más acojonante de tu vida? , que siempre alardeaste de tu piel de secuoya, contemplas ahora envidioso la anorexia de los juncos.
Supuras miedo.
Yo percibo un rumor, las más hermosas notas encarnadas por el más torpe de los intérpretes. Respiro, vivo, siento; deseo un puto delito. Te deseo.
... Y es que en tus ojos de barro ya se han hundido muchos barcos. No veo por qué mi débil corazón y su ilusa góndola han de creerse más afortunados.
No podré escribir mucho estos días. En dos semanas los exámenes empezarán a morderme. Y deseo plantarles buena batalla.